Luego de los cinco días de paro que realizó la Unión Tranviarios Automotor (UTA) en Tucumán, desde el municipio capitalino apuntaron contra al sector empresarial, al que acusaron de usar una metodología extorsiva con los usuarios del transporte público.
“Consideramos que se está utilizando una metodología extorsiva de parte de parte del empresariado y desde determinado sector del sindicalismo le es funcional. Ante un pedido y una necesidad de un incremento de tarifa se recurre a una medida extrema, desproporcionada, inconsulta y que le quita legitimidad al reclamo”, dijo el secretario de gobierno de la municipalidad de la capital y legislador electo, Walter Berarducci, en declaraciones a LG Play.
"El eje central de este servicio público debe ser el usuario, no los actores prestatarios. En Tucumán por nuestras características geográficas no tenemos otra alternativa de transporte accesible a la mayoría de la población", añadió.
No puede alegremente decretarse un paro de cinco días
El funcionario explicó que "el intendente (Germán Alfaro) remitió al Concejo Deliberante un proyecto de declarar al transporte público como esencial y como consecuencia sanciones a los empresarios (multas económicas y quita de concesión)".
Según Berarducci, el proyecto prevé "ponerle un límite a las interrupciones del servicio público. Garantizar su continuidad. Nuestro instrumentos legales tienen un acotado alcance que es dentro del municipio capitalino".
Por último, sostuvo que "con el boleto estudiantil subsidiamos al usuario, no al empresario".